INVISIBLE
Invisible como el oxígeno
Camuflajes irreales
Poderosa invisibilidad
Estar presente dentro del vacío impalpable
Esconderse en las imágenes artificiales y desaparecer en la realidad inmaterial
Los humanos usamos herramientas que permiten la invisibilidad física a pesar de que lo invisible es imposible de ver por los humanos
El deseo es invisible
Que nos empuja a querer ser invisibles?
La invisibilidad habla de nuestros miedos o nuestros deseos?
Nos invisibilizamos a lo desconocido para disfrazar la verdad o la mentira ?
Todo es una ilusión INVISIBLE
VickyPujolFerrari
2019
Alguna vez leyendo a Borges me conmovió una reflexión que era algo similar a esto:
“…una mañana de febrero caminando por Constitución noté que el cartel de la esquina había cambiado su publicidad. Me di cuenta rápidamente que ese sería el primero de una serie infinita de cambios que ya no verá una persona que yo amaba pero que a partir de hoy, ya no está. El universo comenzaba a alejarse de ella...” Me hizo pensar en el tiempo, en el devenir de las cosas y en que uno extraña de manera muy aleatoria. Una sensación repentina relacionada con una emoción, puede activarse ante cualquier cosa del mundo. Del mismo modo funcionan las sensaciones placenteras. Uno puede intentar atraerlas y generarlas pero suelen ser escurridizas y eso las hace impredecibles y mágicas. El espacio público es un terreno que pretende ser controlado, está diseñada su circulación, repleto de marcas en el piso, señales de tránsito y acuerdos tácitos, pero la permanentemente acción humana y animal quiebra y perturba de múltiples modos ese preconcepto de reglas, intenciones, derechos y posibilidades. En la actualidad, las estrategias publicitarias pueblan el imaginario colectivo y por eso resultan tan oxigenantes las situaciones en donde uno no comprende lo que sucede. El gesto de poner una cortina dorada en un terreno compartido parecería invitarnos a festejar algo, a compartir un momento de celebración con gente desconocida. Atravesar una suerte de puente/portal hacia un momento divertido aunque solo sea por unos segundos y luego todo se esfume. La velocidad del paisaje contemporáneo puede detenerse a través de una acción poética. Y en este desconcierto repentino nos obligamos a buscar en nuestro lenguaje algo para explicarlo. Intuyo que los espectadores desprevenidos habrán sentido una confusión al atravesar con su auto una cortina dorada y frágil. Habrán intentado nombrarlo o definirlo como lo estamos intentando ahora, pero sospecho que no encontraremos el modo. Esta simple búsqueda de la palabra o el sentimiento adecuado, provoca que nuestro horizonte de pensamiento intente expandirse. Podríamos preguntarnos si todo tiene que tener un nombre, o un fin o un propósito o un inicio o un punto de llegada o un porque o un para qué. Quizás a través de la sorpresa o el desconcierto, las personas podamos de-construir la trama de pensamientos que nos construyen y al mismo tiempo nos encierran. Algunos artistas se proponen eso. Una liberación de todo lo aprendido y aprehendido, al menos por unos instantes, para preguntarnos adonde nos condujo esa trama. Esta sensación de desamparo nos somete a un hermoso miedo. Hay que atravesarlo.
Leonardo Cavalcante
2018
Victoria Pujol Ferrari nos invita a bucear en la interioridad de su más reciente obra. En cierta forma, destapa la intimidad de sus figuras al estado más puro del ser, donde los miedos, el silencio, la libertad, el descubrimiento y la sensualidad actuaban como medios para abordar el mundo, encontrar nuevos sentidos, y quebrar la continuidad en tiempo y espacio. La selección de obra refleja una experiencia previa al lenguaje de su arte, el cual es compuesto por fragmentos que captan un momento y controlan expresiones del cuerpo. Edgar Degas logró captar estilos de vida, gestos y estados de ánimo, influenciado por la fotografía. En ese contexto, la obra de Pujol Ferrari viaja en una geometría espacial dada por luces y sombras en la cual los cuerpos se funden y son generados por una paleta monocromática originada a partir de recortes fotográficos del universo interno de la artista. Una retrospectiva cargada de emociones. El cuerpo como articulador emocional, donde todos los estados de interioridad son visibles…
Julieta C. Montoya
2017
Las obras de esta artista expanden los límites del objeto y la escultura . El universo femenino, la infancia sus fantasías y temores crean un paisaje de alto voltaje físico. Sus acciones en el espacio público crean ambientes sobrenaturales en la gran metrópolis, aguas fucsias invaden la calma de la ciudad y convierten el agua en sangre vital en las venas de la metrópolis. Sus objetos narran el misterioso mundo de la psiquis femenina y la infancia allí donde todos guardamos la clave de nuestra vida. Lagrimas de cristal y metáforas físicas, piensan el cuerpo y lo simbolizan en objetos , muñecos y juguetes poetizados.
Fabiana Barreda
2014
Las fabulosas cantidades de barbies, colorantes y fósforos parecen ausencia de arte y hacen visible el molde fabril que clona una y otra vez estos objetos. Es así que en su trabajo Victoria Pujol Ferrari abraza la repetición para producir. Ella logra que "lo mismo" se acumule y ofrezca sentido en estas obras. El ritmo de lo grande y de lo miles y miles es urbano y natural al mismo tiempo. El trabajo de Victoria piensa en la dupla sintético-biológico con picardía; seres de alfileres y poliuretano, terneras con strass, lágrimas de silicona. La presencia de la sexualidad y la intervención/transgresión tiene un atrevimiento joven, que abordados junto a temas más oscuros, hablan de ese temprano sentir de las contradicciones. Colores que se abren su propio espacio y texturas que fuerzan colores. Pujol Ferrari hace uso de productos reproducidos una y otra vez por matrices y máquinas industriales. Por ello los materiales con los que trabaja son principalmente plásticos, químicos o productos sintéticos. Con ellos esta joven artista ya ha encontrado su estilo.
J. T.
2010